Review Sin Slayers: Pecados, pecadores, y héroes

Nos ponemos la armadura, el arco, el bastón, cargamos al bardo en la carreta y nos adentramos en esta historia mágica llena de demonios y pecados.

Sin Slayers es un juego de estrategia por turnos y rol desarrollado por el estudio Ruso Goonswarm, y publicado por Black Tower Entertainment. El juego está basado en un mundo de fantasía muy oscuro donde es nuestro deber explorar diferentes escenarios eliminando demonios y pecadores.

El valle de los pecadores caídos

La historia de Sin Slayers comienza cuando nuestros héroes llegan a una vieja iglesia, salvándose por los pelos de las manos de poderosas criaturas. Dentro de la abadía un viejo sabio y ciego los está esperando y tras estas puertas nos cuenta que gracias a los pecados de la gente los demonios se están levantando.





Cuantos mayores los pecados más peligroso se pone el mundo, y nuestros protagonistas por ser puros y libres de pecado pueden hacerle frente. De momento estamos a salvo dentro de la vieja iglesia pero los poderes del anciano se están debilitando y es hora de hacer algo.

El juego nos propone acabar con 7 demonios basados en los 7 pecados capitales e implementa mecánicas basadas en los pecados que vamos a detallar más adelante. El último lugar puro no va a ser únicamente un centro para recibir misiones sino que también nos va a permitir cambiar de personajes, conseguir nuevos equipos, y hablar con los NPC que rescatemos a lo largo de la aventura o que vayan llegando a la abadía. 

En el valle de los pecadores caídos, donde se desarrolla el juego, los pecados humanos le dieron forma a las criaturas que ahora lo gobiernan. Se conocen como Sin Lords, o Señores del Pecado y nuestra tarea si queremos dejar la iglesia y seguir nuestro camino es derrotarlos.

Según el sabio ciego ningún alma que llegó antes que nosotros logró eliminar ni siquiera un Señor del Pecado. Pero como ahora somos 4 tiene toda la fe puesta en que nosotros vamos a lograrlo, además como mencionamos antes no tenemos otra opción. Las puertas permanecerán selladas mágicamente hasta que el último de los Señores del Pecado sea eliminado.

Nuevas viejas mecánicas

Sin Slayers está fuertemente dividido en varias partes, es un RPG por turnos a la hora del combate pero para movernos por el mapa lo hacemos por casilleros. Y acá es donde resulta extraño en un comienzo, si bien nos movemos por casilleros no hay turnos para ejecutar los movimientos, es decir que podemos ir y venir cuanto queramos.

A pesar de no haber turnos para movernos en el mapa no vamos a tener idea que hay en el casillero siguiente, puede ser un enemigo, una trampa, algo para explorar, o quizás una fuente en la que refrescarnos. En todo momento el escenario va a ser una incógnita y dado que tiene elementos Roguelike vamos a tener que volver a hacer un mismo escenario varias veces para cumplir algunas de las misiones. Por otro lado cuando volvamos a hacer estás misiones, el mapa se va a generar de nuevo de forma procedural. Así que no hay forma de saber donde pisar seguro… ¿O si?

El Guerrero tiene una habilidad activa que permite ver si hay algo en los casilleros a la redonda. Pero sólo vamos a saber sí hay algo, lo que no vamos a saber es el contenido del casillero. Esto nos es útil cuando queremos avanzar y estamos intentando evitar un combate, por el motivo que fuere, pero tenemos que avanzar hacia el objetivo. Además en el área de exploración vamos a encontrarnos con cuerpos, tumbas, o heridos. En estas situaciones podemos elegir si dejar ir está oportunidad de conseguir equipo o ítems, o saquear sin remordimiento. 

Pero hay que tener en cuenta que las decisiones vienen con un precio a pagar, si decidimos no hacer nada perdemos la oportunidad y seguimos nuestro camino. Pero en el caso que saqueamos, por ejemplo, una tumba aumenta nuestro nivel de pecado lo que vuelve a los enemigos más fuertes. Como mencionamos antes los demonios que azotan este valle vienen del pecado de los hombres, esa es la fuente de su poder. Y la gente de Goonswarm lo implementó directamente como mecánica dentro del juego.

Saquear tumbas o cadáveres aumenta nuestro nivel de pecado, lo que hace que los demonios en ese nivel se vuelvan más fuertes. Una mecánica muy interesante es que todos los objetos relacionados a un pecado en particular provocan también un aumento. Por ejemplo durante el primer acto mientras buscamos a Gula, sí usamos ítems curativos relacionados a los alimentos en cualquier momento en este mapa aumenta el nivel de pecado. Por otro lado resolver algunas misiones, decidir no saquear, o utilizar unas fuentes especiales bajan nuestro nivel de pecado.

A medida que avanzamos en el juego se van a sumar nuevos héroes a nuestro grupo, algunos de los cuales los vamos a encontrar durante la aventura. Otros aventureros por otro lado van a llegar a la capilla de la misma forma que lo hicimos nosotros.

La estética del pecado

El apartado gráfico es algo en lo que a pesar de ser muy sencillo se destaca Sin Slayers. La estética es Pixel Art y mientras nos encontramos fuera de combate los diseños no dicen demasiado. Eso sí, cuando entramos en combate los dibujos de los personajes cobran un papel más central, de la misma forma que cuando estamos dentro de la abadía.

Los fondos también son protagonistas en esta parte de la historia y es que están armados tipo diorama 3D. Si bien los fondos son en dos dimensiones están cortados en varias capas que al mover el puntero sobre el campo de batalla provoca un efecto símil profundidad. Además si nos movemos por el escenario algunos elementos van a resaltar un contorno amarillo, y sí les hacemos click podemos encontrar ítems. 

Tanto los fondos dibujados como el diseño de los personajes están muy bien cuidados, y algo que destaca es la vieja iglesia. Los colores y el nivel de detalle dotan este pequeño escenario de una gran complejidad, además que lo hacen más que agradable a los ojos.

¿Nos condenará al infierno?

Esta aventura mezcla una serie de componentes diferentes que la hacen una alternativa interesante a otros juegos. Si bien avanzar y completar las misiones que los NPC nos van presentando, y que necesitamos para conseguir mejoras para nuestro equipo, lleva tiempo resulta reconfortante y entretenido. Las mecánicas como el nivel de pecado en función de decisiones que tomamos varia bastante el juego permitiendo que nos aventuremos más a riesgo de volver los combates bastante más intensos. Estos apartados, además de lo aleatorio de la exploración hacen que Sin Slayers se luzca más allá de su aparente simpleza inicial. 

Sin Slayers salió el 5 de septiembre de 2019 para PC a través de Steam, cuenta con una demo, y se puede conseguir por Ar$179,99.